La recuperación de negocio en la nube y la mejora de la resiliencia son importantes para garantizar la continuidad operativa ante eventos imprevistos. Un ejemplo es la estrategia de Continuidad del Negocio y Recuperación ante Desastres (BCDR), que combina la planificación de la continuidad del negocio y la recuperación ante desastres para reducir el impacto de interrupciones y recuperar rápidamente las operaciones. Además, los planes de recuperación virtualizados (VRP) utilizan instancias de máquinas virtuales que pueden estar listas para funcionar en minutos tras una interrupción, proporcionando alta disponibilidad y recuperación rápida de aplicaciones críticas.